Pocas veces algo que he escrito ha suscitado tantas respuestas, y entre ellas hay una prolija que me llamó la atención. La había escrito Andrés Rueda, presidente de la asociación de directores de residencia ASCAD y que desde una perspectiva que parece mayéutica presentaba una serie de preguntas, las respuestas a las cuales podría marcar un replanteamiento del sistema de atención a mayores.
Me daba pena que algo así se quedase como un comentario a una noticia por lo que le he pedido que me permita reproducirlo en este blog y, como lo ha aceptado (muchas gracias), aquí os lo dejo:
Al
hilo de unos escritos de Josep de Martí respecto problemas en Barcelona con
algunos centros gestionados quisiera aprovechar para meter más elementos en
debate, veamos:
Andrés Rueda. Presidente de ASCAD |
¿Y si hacemos un ejercicio imaginación y añadimos a estas reflexiones unos cuantos datos para tener una óptica más amplia sobre la parte de iceberg que no vemos?
Hemos citado concursos enrarecidos o
empresas de extraña gestión o directamente tramposas. De acuerdo, pero ...?y si
añadimos, por ejemplo, unas cuantas cosas más como las siguientes?:
- ¿Sabemos cuál es perfil REAL de los
dependientes en asistencia residencial HOY?. ¿Sabemos las necesidades REALES?.
Con datos no con "flores".
- ¿Sabemos cuál es el índice de rotación o expectativas de vida de estas personas al ingreso?
- ¿Sabemos que los centros están obligados a trabajar con unos perfiles de profesionales que quizá habría que replantearse para ver si son los adecuados a los perfiles de residentes ingresados?
- ¿Sabemos cuál es el índice de absentismo laboral y los equilibrios incesantes para poder completar mínimos asistenciales ante absentismos de "hoy para mañana" en lunes, viernes, o puentes por bajas laborales de enfermedades de irrupción brusca y curación milagrosa? Y hablo de éstas, no de las bajas debidamente justificadas que bastante faena tienen con llevar adelante sus achaques... porque además suelen ser las personas más abnegadas y responsables en su trabajo, no hagamos demagogias donde no las hay. Éste también es un "tabú" tan opaco como los concursos y conozco muchos directores y personal de esos que "siempre están" que tiemblan ante los "puentes" o los "findes".
- ¿Está la administración poniendo los recursos económicos que TODOS los agentes implicados necesitan: empresas, entidades, trabajadores, proveedores, usuarios...?
- ¿Debe invertir más en dependencia o en aeropuertos, escuelas, comercio, tanques, o política exterior,... o en todo eso a la vez?. ¿Qué podemos? ¿en qué debemos?.
- ¿Es sostenible, ni siquiera a medio plazo, una gerodependencia como la entendemos hoy que contemple las inversiones y los mantenimientos necesarios en infraestructuras y personal?. Pensemos en el grave problema de las pensiones...
- ¿Debemos permitir o pedir verdaderos "Taj Mahal" asistenciales full equip mientras miles de personas mueren esperando plaza?.
- ¿Podemos permitirnos dependientes de clase "bussines" y otros que no van ni en "turista" o que siempre tienen "oberbooking" y sencillamente mueren esperando?
- ¿Tenemos que cerrar los ojos ante estos verdaderos gerontocidios sociales encubiertos?
- ¿Hay otras alternativas asistenciales? ¿se trabaja en ellas?, ¿se hacen "números" de todas? ¿sabemos cuánto cuestan? ¿nos dejamos llevar por modismos biensonantes que no sabemos su coste y sí lo sabemos, no nos lo dicen?
- ¿Sabemos cuál es el índice de rotación o expectativas de vida de estas personas al ingreso?
- ¿Sabemos que los centros están obligados a trabajar con unos perfiles de profesionales que quizá habría que replantearse para ver si son los adecuados a los perfiles de residentes ingresados?
- ¿Sabemos cuál es el índice de absentismo laboral y los equilibrios incesantes para poder completar mínimos asistenciales ante absentismos de "hoy para mañana" en lunes, viernes, o puentes por bajas laborales de enfermedades de irrupción brusca y curación milagrosa? Y hablo de éstas, no de las bajas debidamente justificadas que bastante faena tienen con llevar adelante sus achaques... porque además suelen ser las personas más abnegadas y responsables en su trabajo, no hagamos demagogias donde no las hay. Éste también es un "tabú" tan opaco como los concursos y conozco muchos directores y personal de esos que "siempre están" que tiemblan ante los "puentes" o los "findes".
- ¿Está la administración poniendo los recursos económicos que TODOS los agentes implicados necesitan: empresas, entidades, trabajadores, proveedores, usuarios...?
- ¿Debe invertir más en dependencia o en aeropuertos, escuelas, comercio, tanques, o política exterior,... o en todo eso a la vez?. ¿Qué podemos? ¿en qué debemos?.
- ¿Es sostenible, ni siquiera a medio plazo, una gerodependencia como la entendemos hoy que contemple las inversiones y los mantenimientos necesarios en infraestructuras y personal?. Pensemos en el grave problema de las pensiones...
- ¿Debemos permitir o pedir verdaderos "Taj Mahal" asistenciales full equip mientras miles de personas mueren esperando plaza?.
- ¿Podemos permitirnos dependientes de clase "bussines" y otros que no van ni en "turista" o que siempre tienen "oberbooking" y sencillamente mueren esperando?
- ¿Tenemos que cerrar los ojos ante estos verdaderos gerontocidios sociales encubiertos?
- ¿Hay otras alternativas asistenciales? ¿se trabaja en ellas?, ¿se hacen "números" de todas? ¿sabemos cuánto cuestan? ¿nos dejamos llevar por modismos biensonantes que no sabemos su coste y sí lo sabemos, no nos lo dicen?
No quiero con esto dar ni quitar razones a opiniones todas respetables y que algunas suscribo, simplemente digo que la gerontoasistencia es compleja, es cosa de TODOS, que merece una revisión plural tras diez años, y que muchos problemas actuales son una broma por mantener la administración los ojos cerrados ante el verdadero tsunami de dependientes que en parte YA tenemos y que nos viene encima mientras que estamos fijándonos en la pequeña ola que apenas nos moja los pies… cuando lo previsto es que nos va a arrasar un verdadero maremoto que acabará con el sistema.
Recordemos por ejemplo que somos la SEGUNDA comunidad por la cola en número de dependientes con el derecho reconocido y que están en lista de espera esperando una atención. Vergonzoso.
No podemos convertirnos en una democracia social de "derechos de papel"... pero incumplíbles y que solo generarán trampas y mas frustración. Sin "reset", el sistema seguirá fallando.
Fijémonos en la financiación de la dependencia, ¿es la adecuada?. Los concursos,... ¿salen a los precios que debieran?
Cuántos euros tenemos, cuántos somos y a cuánto tocamos para ser equitativos. ¿Se gestionan bien nuestros dineros?
La equidad es una base de los derechos sociales y siempre tiene que estar encima de la mesa, lo contrario es egoísmo sea de la empresa, del trabajador o de las familias,... Como en botica, aquí hay de todo para todos y el papel del "bueno" y el "malo" de las películas en este sector es de más difícil y compleja definición y está mas repartido de lo que parece.
Todos sabemos comprar un buen vino, excelente, con
500€, pero la gracia -o lo que hay- es comprar un vino razonable a un precio
razonable para que todos podamos beber un vino "no malo",.. si es que
consideramos que tenemos de beber vino, de lo contrario tenemos que disponer de
500€ por cabeza....
Nosotros también
formamos parte de la solución o del problema.
Pensemos.
Gracias por tu lectura y saludos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario